actes sud
En la Francia jacobina donde París es el eje y la industria editorial sólo prospera en Saint-Germain-des-Près, una pequeña editorial provenzal, Actes Sud, demostró que había vida para los libros fuera de París. Su creador, Hubert Nyssen, nacido el 11 de abril del año 1925 en Bruselas, naturalizado francés en 1976, ha fallecido, a sus 86 años en Arles. Ya había dejado en buenas manos, las de su hija Françoise, lo que ya no es una editorial pequeña.
Doctor en letras, profesor en Lieja y en Aix en Provence crea en 1969 un taller de cartografía temática y estadística, cuyas iniciales en francés corresponden a Actes. Nueve años más tarde, con su mujer, la traductora Christine Le Boeuf, transforma el taller en editorial. Y añaden Sud a la sigla.
"Yo era un árbol en una maceta hasta que encontré mi lugar -explicó en el 2000 a Libération-, entonces, rompí la maceta y me arraigué". En 1983 trasladan la editorial aun amplio aprisco, en un villorrio arlesiano, Le Méjan. Primer eco en Saint-Germain: en 1985 Actes Sud descubre a Nina Berberova y a Paul Auster, en 1993 a Nancy Huston, Otra fecha importante: en 1979, la hija, Françoise, renuncia a una carrera de funcionaria, se integra en Actes Sud y adopta su divisa: "placer y necesidad". La imposición de la editorial estimula el nacimiento de "pequeñas editoriales provinciales", como piadosamente las denomina París.
La segunda época fue triunfal: en 2002, Imre Kertész, autor de Actes Sud es galardonado con el Nobel de Literatura y en 2004 el Goncourt corona un título de la editorial, Le Soleil des Scorta, de Laurent Gaudé. Ese mismo año, Actes Sud crece -fusión con Editions du Rouergue, participación en Jacqueline Chambon y Bleu de Chine- y gana la lotería: compra, en Suecia, los derechos de Milenio, de Stieg Larsson.
19-XI-11, Ó. Caballero, lavanguardia